
Una punta de lanza ósea hallada en la cueva rusa de Mezmaiskaya, en el Cáucaso Norte, ha sido datada entre 80.000 y 70.000 años, lo que la convierte en la más antigua hallada en Europa. El estudio sugiere que fue fabricada por neandertales, quienes lograron desarrollar esta tecnología de manera independiente antes de la llegada de los Homo sapiens. La punta de lanza estaba unida a un cuerpo de madera mediante un adhesivo bituminoso.