
Un equipo internacional de científicos analizó más de 40 muestras de huesos y dientes de la Tumba de Perséfone, descubriendo que el hombre enterrado medía 1,67 metros y tenía entre 25 y 35 años cuando murió, lo que sitúa su muerte entre el 388 y el 356 a.C. Esto descarta a Filipo II, muerto en 336 a.C. Los restos encontrados sugieren que se trata de un miembro importante de la familia real macedonia, posiblemente Amintas III, Alejandro II o Pérdicas III. También se hallaron restos de una mujer joven, de entre 18 y 25 años, y objetos como cuentas doradas y fragmentos de mármol.