
En 2011, un terremoto y tsunami causaron un accidente nuclear en Fukushima, Japón, liberando radiación al medio ambiente y generando 14 millones de metros cúbicos de tierra levemente radioactiva. El gobierno japonés planea utilizar parte de esta tierra en los canteros de flores de la oficina del primer ministro para demostrar que es segura. La Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA) aprobó el plan de Japón para reciclar un 75% de la tierra levemente radioactiva en 2024. El Ministerio de Medio Ambiente sostiene que la tierra se puede reutilizar sin riesgo y se cubrirá con una gruesa capa de tierra común. El secretario de gabinete Yoshimasa Hayashi dijo que el gobierno tomará la iniciativa para dar el ejemplo. La IAEA confía en que la estrategia de Japón para reciclar y disponer de la tierra y los residuos será segura.