
Enrique Grande afirma que la inteligencia artificial y el análisis masivo de datos están revolucionando la medicina, permitiendo diagnósticos más precisos y tratamientos personalizados. El proyecto DIPCAN busca crear un 'gemelo digital' de los pacientes para predecir respuestas a fármacos y comportamientos clínicos. La inteligencia artificial puede analizar imágenes de tumores y detectar enfermedades con mayor precisión que los patólogos humanos. Se espera que la tecnología avance hacia la creación de dispositivos inteligentes que puedan medir parámetros clínicos y servir de sensores. La FDA ha aprobado 146 dispositivos de este tipo. El futuro de la medicina incluye la neurotecnología, con chips como el de Neuralink que pueden ser implantados en el cerebro y funcionar con el pensamiento.