
La Universidad de Ciencia y Tecnología de China ha diseñado un sistema para generar energía a partir de la atmósfera marciana, con una eficiencia de conversión de hasta el 22%. También han desarrollado una batería de litio-dióxido de carbono que utiliza el CO2 de la atmósfera de Marte como agente activo de la descarga, con una densidad energética de 373 Wh kg⁻¹ y una durabilidad de 1.375 horas. China planea probar estos conceptos en misiones robóticas en Marte, como la sonda Tianwen-3, que se lanzará en 2028.