
Un estudio publicado en la revista Animal Welfare, realizado por un equipo de investigadoras de la Universidad Autónoma de Barcelona y varios equipos de veterinarios de Ciudad de México, encontró que la presencia de los dueños puede reducir el dolor y el estrés en perros después de una cirugía. El estudio se centró en 18 perras adultas que fueron sometidas a una ovariohisterectomía, y se dividió en dos grupos: ocho recibieron la visita de sus dueños durante 45 minutos después de la recuperación inicial de la anestesia, mientras que las otras diez permanecieron en el área de hospitalización sin compañía humana. Los resultados mostraron que las perras que recibieron la visita de sus dueños mostraron una reducción significativa en los niveles de dolor percibido y en los indicadores de estrés, y aumentaron los gestos asociados a bienestar.