
Un estudio publicado en 2023 por Psychology Today encontró que las preferencias alimentarias están relacionadas con la personalidad. Quienes disfrutan de sabores amargos tienden a ser antisociales, mientras que los amantes de los sabores dulces son más sociables. La gerontóloga Corinna Loeckenhoff lideró una investigación que concluyó que dejar la parte más rica de la comida para el final está relacionado con una percepción del futuro y una 'edad emocional' más joven. El experimento, realizado con 90 adultos, reveló que los jóvenes optan por comenzar con imágenes negativas y terminar con positivas, mientras que los adultos mayores alternan emociones.