
TSMC Arizona ha respondido oficialmente a la investigación del Departamento de Comercio sobre la seguridad nacional vinculada a la importación de semiconductores y equipos de fabricación, solicitando que no se impongan medidas que puedan afectar sus planes de expansión en suelo estadounidense, cuya inversión prevista asciende a 165.000 millones de dólares. La compañía ha argumentado que las importaciones críticas para la construcción y operación de fábricas avanzadas deben verse como un refuerzo a la seguridad nacional, no como una amenaza. TSMC pide explícitamente que no se impongan restricciones ni aranceles a materiales críticos para la construcción y operación de sus fábricas, argumentando que muchos de estos insumos no están disponibles en EE.UU., ni en calidad ni en cantidad.