
Un estudio presenta una herramienta de imagen llamada Phenocycler 2.0 que permite mapear la médula ósea de ratón con alta precisión sin alterar su estructura, lo que abre nuevas posibilidades para investigar enfermedades como leucemia, mieloma o patologías autoinmunes. La técnica utiliza la plataforma de imagen multiplexada para etiquetar decenas de anticuerpos con códigos de barras de ADN y detectar cada uno secuencialmente mediante ciclos de adquisición de imagen. Los investigadores lograron conservar el tejido intacto, incluyendo estructuras adyacentes como hueso y músculo, y validaron el protocolo comparando los resultados con citometría de flujo. La correlación entre ambas técnicas fue muy alta (r = 0,90), lo que confirma la fiabilidad del enfoque multiplexado. El estudio fue realizado por un grupo de investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Indiana, liderado por Sonali Karnik y Reuben Kapur.