
Nissan en España ha implementado varias iniciativas para reducir las emisiones de CO2, como un parque de más de 10.000 vehículos eléctricos que evitan la emisión de 17.500 toneladas de dióxido de carbono al año, equivalentes a lo que absorbería un bosque de más de medio millón de árboles. Además, las plantas de Ávila y Cantabria han logrado ahorrar más de 800 toneladas de CO2, equivalentes a plantar 33.000 árboles o reforestar 66 hectáreas de bosque. El objetivo de Nissan es que el 85% de sus ventas en España sean de vehículos electrificados para 2025. La empresa también promueve el uso de materiales sostenibles y el reciclaje de vehículos al final de su vida útil, y ha implementado sistemas para reutilizar baterías de modelos eléctricos. La planta de Ávila ha reducido su consumo de energía en más de 685.000 kWh y ha evitado la emisión de más de 300 toneladas de CO2, mientras que la planta de Cantabria ha evitado la emisión de 500 toneladas de CO2 en 2024.