
El mar Mediterráneo presenta una anomalía térmica de 2,26º Celsius por encima de lo normal, según datos del SOCIB. La situación es especialmente llamativa en el Mediterráneo occidental, con una anomalía de 2,65º. Los expertos atribuyen esto a la ausencia de viento de tramontana, la estabilidad propiciada por anticiclones subtropicales y la temperatura superficial del Mediterráneo, que ha estado por encima de la media en los últimos años. Las previsiones indican que la situación podría empeorar, con anomalías térmicas de hasta 5,5º en algunas áreas. Esto podría tener consecuencias en la aparición de tormentas con mayor capacidad destructiva.