
El telescopio James Webb ha confirmado que la expansión del universo no se comporta como debería, según los datos del Hubble. La constante de Hubble, que representa la velocidad a la que el universo se expande, es más alta de lo que se espera. El equipo de Adam Riess ha utilizado la mayor base de datos obtenida por el telescopio James Webb durante sus dos primeros años en órbita para poner a prueba las observaciones del Hubble. Los resultados del Webb y del Hubble coinciden notablemente, reforzando la precisión de las observaciones. La hipótesis más intrigante es la presencia de una fuerza invisible conocida como energía oscura, que estaría acelerando la expansión del universo.