
Enrico Bosco, dueño del restaurante Peppe Fusco, contó que una persona que había dejado una opinión positiva en una plataforma de valoración hace dos años, y que había sido invitada a trabajar en su restaurante Malafemmena como lavaplatos por 40 horas a la semana, nunca se presentó al trabajo y ahora ha dejado una reseña negativa en el restaurante, acusando de explotación laboral y uso de alimentos de baja calidad. La persona había sido ofrecida un contrato y ayuda para encontrar una habitación de alquiler, pero no se presentó. El restaurante ha respondido a la reseña negativa, destacando que la persona nunca trabajó en el restaurante y que las acusaciones son infundadas.