
La macrogranja avícola Son Perot en Llucmajor, con 130.000 gallinas, sigue operando sin autorización ambiental integrada, pese a una sanción de 150.000 euros. El Ayuntamiento de Llucmajor, gobernado por un tripartito del PP, Vox y ASI, aprobó por unanimidad en septiembre de 2024 inspeccionar la granja, pero no ha tomado ninguna medida. La licencia de obra data de 1968 y la empresa ha solicitado la legalización de construcciones sin licencia. El Govern ha iniciado una investigación y se deberá determinar si hay nuevos incumplimientos. La granja se encuentra a un kilómetro de los núcleos urbanos de Tolleric y Badia Gran, y supera las 80.000 gallinas ponedoras, lo que requiere una distancia mínima de 6.000 metros lineales respecto al suelo urbano residencial más cercano, según la nueva normativa.