
El gobierno ha decidido mantener el mínimo exento fiscal en 15.876 euros anuales, por debajo del nuevo Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de 16.576 euros brutos. En su lugar, ha creado una deducción en cuota para retornar a los trabajadores que cobran el SMI el plus que les iba a sangrar, lo que costará alrededor de 200 millones de euros. Esto beneficia a 540.000 contribuyentes, mientras que si se hubiera elevado el límite exento, habría mejorado la carga fiscal para 4 millones de españoles. El experto fiscal José María Mollinedo considera que el coste de la deducción es bajo en relación con la recaudación del IRPF, que fue de 145.659 millones en 2024.