
Kering, conglomerado de lujo, informó una disminución del 14% en sus ventas, atribuida principalmente a la debilidad de Gucci, que registró una disminución del 25% en sus ventas. En respuesta, Kering implementó medidas de reducción de costos, incluyendo el cierre de 25 tiendas y la decisión de no participar en la Met Gala 2025, un evento clave en el calendario de la moda. El costo de participar en la Met Gala era alto, con un boleto individual por celebridad de 75.000 dólares y un costo de mesa de hasta 600.000 dólares. La marca busca un nuevo diseñador para replicar el éxito de Alessandro Michele en Gucci.