
Corea del Sur, líder en el mercado de televisores, está perdiendo terreno frente a China. Las marcas chinas Hisense y TCL están ganando mercado gracias a la subvención de productos y el control de la cadena de fabricación de paneles LCD. Samsung y LG, líderes en Corea del Sur, están aplicando recortes drásticos para reducir costes. La caída de las ventas globales y el aumento del coste de componentes, especialmente los paneles LCD, que subieron un 3% en cinco meses, están afectando a las empresas coreanas. Un fallo del Tribunal de Comercio Internacional de EE.UU. anuló aranceles que afectaban a los fabricantes chinos, lo que elimina un obstáculo para que TCL y otras marcas chinas avancen en el mercado estadounidense.