
El Ministerio de Consumo investiga a Ticketmaster por posibles irregularidades en la venta de entradas para los conciertos de Bad Bunny en Madrid y Barcelona, previstos para mayo y junio de 2026. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) denunció que la plataforma aplicaba recargos que triplicaban el precio inicial de las entradas, con un precio mínimo de 79,50 euros y un máximo de 269,30 euros. El Ministerio de Consumo prepara una reforma legislativa para obligar a que el precio total de cualquier entrada sea visible desde el principio.