
Un investigador de la Universidad de Missouri plantea que las galaxias rojizas no siempre son antiguas, sino que pueden estar en pleno proceso de formación de nuevas estrellas. Esto se debe a que las estrellas formadas en estas galaxias son de menor masa y brillan con tonos rojizos. La hipótesis sugiere que el universo forma aún más estrellas de lo que se creía, y que algunas galaxias rojas pueden haber estado formando estrellas rojas y de pequeño tamaño desde el principio, sin ser el resultado de un estallido. El investigador, Charles Steinhardt, publicó su estudio en la revista The Astrophysical Journal.