
Un equipo de investigadores de Japón, Taiwán y Dinamarca reveló que el hueso de mandíbula descubierto en Taiwán, conocido como Penghu 1, perteneció a un varón denisovano. El análisis paleoproteómico reveló dos variantes de proteínas relacionadas con los denisovanos. El fósil tiene entre 10.000 y 70.000 años de antigüedad, o entre 130.000 y 190.000 años. Los denisovanos vivieron en diferentes hábitats y se adaptaron a climas diversos. Se cree que los denisovanos vivieron hace unos 370.000 años, y hasta al menos 30.000 años atrás.