
La religión está experimentando un giro inesperado con la tecnología, ofreciendo nuevas formas de vivir la fe y conectar con lo divino. En Estados Unidos, el porcentaje de creyentes en Dios cayó del 98% en 1952 al 81% en 2022. Plataformas como TikTok y Instagram están repletas de mensajes religiosos y rituales compartidos. La inteligencia artificial se abre paso en el terreno de la religión, con líderes religiosos experimentando con IA para crear música sacra o buscar inspiración teológica. Robots como SanTO o Mindar actúan como guías espirituales en templos de Italia, China y Japón.