
Los alimentos enriquecidos con vitaminas y minerales se presentan como una opción saludable, pero la realidad puede ser diferente. En España, más de la mitad de la población no alcanza los niveles recomendados de nutrientes. Un estudio analizó más de 4.000 productos y encontró que solo uno de cada cinco productos enriquecidos se considera saludable. Los cereales más saludables eran los más simples, sin aditivos ni vitaminas añadidas. La presencia de vitaminas en una etiqueta no garantiza que el producto sea sano.