
Un equipo de científicos de la Universidad de Missouri ha utilizado organoides neonatales para entender cómo las células del epitelio uterino adoptan su forma definitiva tras el nacimiento. Durante los primeros días de vida, estas células son especialmente plásticas y pueden convertirse en distintos tipos de estructuras según las señales que reciben. Los investigadores han encontrado que la aparición de células basales en situaciones anómalas podría ser un valioso marcador temprano de cáncer o endometriosis. Esto podría revolucionar el diagnóstico precoz de patologías como el cáncer de endometrio o la endometriosis.