
El esperma de salmón se utiliza para obtener polinucleótidos, que se integran en sueros, mascarillas, inyecciones o combinaciones con técnicas como la microaguja o el láser, para restaurar la piel sin dejar residuos. La doctora Araceli González explica que este producto permite apoyar la reparación, la regeneración y la producción de colágeno en la piel. Personalidades como Jennifer Aniston ya se habían sometido a este tipo de tratamientos. El Dr. Adam Friedman detalla que estimula la producción de colágeno, mejora la hidratación, acelera la regeneración celular y cicatrización, y disminuye la inflamación y mejora la pigmentación. El uso de polinucleótidos se ha utilizado en contextos médicos para tratar quemaduras, heridas graves o úlceras, y se ha comenzado a usar para frenar la caída del cabello y fortalecer el cuero cabelludo.