
El Papa Francisco abordó varios asuntos controvertidos, incluyendo la inclusión de personas LGBTI y la pederastia, pero el tema de la 'banca vaticana' sigue siendo un desafío. El Instituto para las Obras de Religión (IOR) ha estado involucrado en varios escándalos financieros, incluyendo la quiebra del Banco Ambrosiano en 1982 y la detención del cardenal Nunzio Scarano por lavado de dinero. Francisco ordenó una auditoría y creó un Consejo de Supervisión para abordar estos problemas. El IOR tiene 5.400 millones de euros en bonos de deuda pública y debe ser gestionado por el nuevo Papa. La filipina Sheila Marie Uriarte-Tan es la primera mujer en ocupar un cargo importante en el banco.