
El Banco Central Europeo (BCE) ha recortado los tipos de interés un cuarto de punto, del 2,5% al 2,25%, debido al daño causado por los aranceles de la Administración de Donald Trump a la economía. La decisión se tomó en un contexto de incertidumbre y tensiones comerciales, con la inflación en la eurozona por debajo del objetivo del 2%. El BCE ha reconocido que la guerra comercial restará otro medio punto al avance del PIB de la eurozona si sigue escalando. La presidenta del BCE, Christine Lagarde, ha destacado que la institución adoptará un enfoque basado en los datos y reunión por reunión para determinar la orientación adecuada de la política monetaria. La Reserva Federal de Estados Unidos también se enfrenta a un dilema, con un rápido deterioro de las perspectivas de crecimiento y expectativas de inflación demasiado elevadas.