
Científicos de la Universidad de Chicago han desarrollado una técnica llamada microscopía volumétrica por ADN, que permite crear mapas 3D del ADN y ARN dentro de un organismo completo sin usar microscopios, luz ni lentes. La técnica utiliza secuencias sintéticas llamadas identificadores moleculares únicos (UMI) que se adhieren al ADN o ARN de cada molécula y actúan como un código postal molecular. Luego, se generan miles de conexiones llamadas identificadores de eventos únicos (UEI) que registran qué UMIs están cerca unos de otros. La frecuencia con la que dos UMIs generan UEIs refleja su cercanía física. La técnica ha sido aplicada a un embrión de pez cebra de 24 horas de desarrollo, logrando reconstruir una imagen tridimensional del organismo completo con una precisión de alrededor de 1,5 micras. Esto permite observar cómo se distribuyen ciertas familias de genes a lo largo del eje anterior-posterior del embrión.