
Investigadores del Instituto Daegu Gyeongbuk de Ciencia y Tecnología (DGIST) en Corea del Sur han desarrollado un material que cambia de estructura según la temperatura, lo que permite manipular partículas cuánticas híbridas llamadas polaritones. El material es un tipo de cristal conocido como perovskita, que cambia su estructura interna con la temperatura, pasando por distintas fases: ortorrómbica, tetragonal y cúbica. En una de estas fases, la fase tetragonal, el cristal muestra una propiedad conocida como ferroelectricidad, lo que permite modificar la interacción entre la luz y la materia dentro del cristal. Los investigadores diseñaron un dispositivo conocido como microcavidad óptica, donde los fotones pueden quedar atrapados y acoplados con los excitones del material. En este entorno controlado, se observó cómo los polaritones cambiaban su comportamiento a medida que el cristal pasaba de una fase a otra. La energía de separación de Rabi de los excitón-polaritones puede ajustarse hasta un 20%, y la fuerza osciladora excitónica correspondiente varía en un 44% durante la transición de fase. La frecuencia de Rabi puede ser sondeada siguiendo la relación de dispersión de los excitón-polaritones utilizando espectroscopía de plano de Fourier.