
China ha completado la rotación de su tripulación en la estación espacial Tiangong, ubicada en órbita baja terrestre, y opera a pleno rendimiento con tres nuevos astronautas. La estación funciona de manera independiente y con protocolos propios, fortaleciendo la soberanía tecnológica de China. El progreso constante de China en el ámbito espacial ha encendido las alarmas en Estados Unidos y Europa, ya que el país trabaja en misiones a la Luna, desarrollo de naves reutilizables y una posible estación lunar conjunta con Rusia.