
Un equipo de científicos de Q-CTRL ha desarrollado un sistema de navegación llamado MagNav, que utiliza sensores cuánticos y algoritmos inteligentes para leer el campo magnético terrestre y posicionar vehículos con una precisión récord de hasta 50 veces más precisa que el GPS tradicional. El sistema se ha probado en vuelo y en tierra, logrando un error de posicionamiento final de solo 22 metros en un recorrido de 6700 kilómetros. El sistema es pasivo, no emite señales y es invisible a radares o dispositivos enemigos, lo que lo hace ideal para entornos militares o sensibles.