
El Tribunal Supremo ha rechazado la querella contra el rey emérito Juan Carlos I por delitos fiscales, presentada en noviembre de 2024, debido a que no aporta hechos ni pruebas nuevas. La Fiscalía ya había solicitado el archivo de esta acción en marzo, recordando que las diligencias abiertas en 2020 concluyeron el 2 de marzo de 2022 sin encontrar elementos suficientes para sostener las acusaciones. La decisión del Supremo refuerza la solidez de las resoluciones judiciales previas y supone un alivio para el rey emérito.