
Estados Unidos y Ucrania han llegado a un acuerdo sobre la explotación de minerales estratégicos y tierras raras en Ucrania, a cambio de ayuda en el conflicto. El acuerdo incluye la creación de un Fondo de Inversiones para la Reconstrucción Estados Unidos–Ucrania, que gestionará licencias nuevas sin afectar a empresas preexistentes. Estados Unidos ha comenzado a enviar a Ucrania cazas F-16 retirados y no operativos, que se utilizarán como fuente de repuestos cruciales para la creciente flota de F-16 donada por países europeos. Se estima que Ucrania recibirá hasta 85 F-16 en condiciones de vuelo, y el suministro de fuselajes desmantelados desde Estados Unidos representa un alivio estratégico en términos de mantenimiento.