
El Gobierno de EE. UU. exime a teléfonos inteligentes, ordenadores, microprocesadores y otros productos electrónicos de aranceles recíprocos. La exención, publicada en un boletín de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, se aplica a un arancel del 125% para China y un arancel base del 10% para otros países. Esto beneficiará a empresas como Apple, Nvidia y Samsung Electronics. El 80% de los iPhone se fabrican en China y el 20% en India. La medida es una cesión de la Administración Trump a empresas estadounidenses que han vivido caídas generalizadas. La Casa Blanca defiende que la Administración sigue instando a las empresas a trasladar la producción a EE. UU.