México intentó atraer a nómadas digitales con medidas especiales hace tres años. Se esperaba que captar un 5% de este segmento generaría 1.400 millones de dólares anuales. En 2022, Airbnb informó que las estancias largas aumentaron un 90% respecto a 2019. Sin embargo, el impacto ha sido negativo: gentrificación, subida de precios y protestas sociales. La Ciudad de México es uno de los 20 destinos globales de Airbnb para nómadas digitales. El gobierno ha anunciado medidas para frenar la gentrificación, como permitir alquileres solo la mitad del año. La alcaldesa Clara Brugada busca soluciones para la vivienda y el mercado inmobiliario.