
La Agencia Tributaria pretende obligar a los autónomos a imputar el resultado de su regularización de cuotas de 2023 en la declaración de la Renta de 2025, en lugar de en la del año en que pagaron sus cotizaciones. Esto afectaría a 1,5 millones de autónomos, con una devolución media de 600 euros. Los expertos anticipan una oleada de reclamaciones. La regularización de cuotas se refiere a la diferencia entre lo pagado y lo que deberían haber pagado según sus ingresos reales. La Agencia Tributaria considera que los ingresos o gastos provenientes de la regularización de cuotas son un cambio de estimación contable, lo que obligaría a imputarlos al año en que se resuelve el proceso, en este caso, 2025.