
Europa teme que China inunde su mercado con productos baratos debido a la guerra arancelaria entre Pekín y Washington. El bloque europeo se encuentra atrapado entre el proteccionismo estadounidense y la necesidad de contener la sobreproducción china. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha prometido vigilar de cerca el flujo de mercancías chinas y ha creado un grupo de trabajo para detectar prácticas de dumping. La UE ha adoptado un enfoque regulatorio riguroso, con medidas arancelarias, controles técnicos y barreras no arancelarias. El déficit récord de Europa con China alcanzó los 332.000 millones de dólares en 2023. La UE y China tienen prevista una cumbre para la segunda mitad de julio para suavizar fricciones.