
Tesla, considerada una de las grandes compañías tecnológicas del mundo, ha visto su reputación y resultados financieros afectados por la incursión de Elon Musk en la política estadounidense. La empresa ha experimentado un descenso del 13% en ventas y un 9% en ingresos, hasta los 19.335 millones de dólares, en el primer trimestre de 2025. El beneficio neto se ha reducido un 71%, quedando en solo 409 millones de dólares. La fortuna personal de Musk ha disminuido, pero se ha visto amortiguada por el crecimiento de SpaceX y xAI. Musk ha prometido reducir su implicación política para sacar a Tesla del problema en el que él mismo la ha metido.