
Los Reyes entregaron el premio Cervantes a Álvaro Pombo, dotado con 125.000 euros, en un acto celebrado en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá, con motivo de su extraordinaria personalidad creadora, lírica singular y original narración. El acto se llevó a cabo en pleno luto oficial debido a la muerte del papa Francisco, con los Reyes vestidos de negro y sin brindis ni premiado en el almuerzo. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no asistió al acto, lo que se considera un plantón al jefe del Estado.