
Hace 18.000 años, durante la última gran glaciación, enormes icebergs del tamaño de ciudades flotaban frente a las costas británicas, dejando profundas cicatrices en el lecho marino del Mar del Norte. Un estudio liderado por el British Antarctic Survey (BAS) revela estas insólitas huellas ocultas bajo capas de sedimento, utilizando datos de sísmica 3D de alta resolución. Los icebergs medían entre cinco y varias decenas de kilómetros de ancho, con grosores de hasta 200 metros. El patrón observado en el Mar del Norte refleja un fenómeno inquietantemente similar al que amenaza a la Antártida hoy: el colapso progresivo de las plataformas de hielo.