
El Gobierno está avanzando en la aprobación de la nueva Ley de Servicios de Atención a la Clientela, que incluirá un sistema de identificación numérica específica para todas las llamadas comerciales. Cada empresa tendrá un código numérico concreto, lo que permitirá distinguir claramente el tipo de llamada recibida. Los usuarios podrán configurar filtros personalizados para bloquear automáticamente las llamadas con el prefijo de comunicación comercial. La medida tiene un punto débil importante: las llamadas realizadas desde el extranjero no estarán sujetas a esta normativa. La enmienda también establece que los contratos formalizados mediante llamadas no consentidas quedarán automáticamente anulados y se impondrá la obligación de renovar el consentimiento para recibir llamadas comerciales cada dos años.