
Bill Gates descubrió que Microsoft utilizaba formularios en papel, lo que generaba un gran gasto. En 1996, se imprimieron 350.000 copias de informes de ventas en papel. Gates decidió eliminar los formularios innecesarios y pasar a un sistema electrónico, lo que redujo el número de formularios de más de 1.000 a solo 60. Esto ahorró a la empresa 40 millones de dólares en 12 meses, ya que cada pedido en papel costaba 145 dólares, mientras que cada pedido electrónico costaba solo 5 dólares.