
El Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) ha entrado en el campus de la Universidad de Columbia para expulsar a manifestantes pro-Palestina, a petición escrita de la universidad. El alcalde Eric Adams ha declarado que la ciudad defiende el derecho a la protesta pacífica, pero no tolera la anarquía. Los manifestantes exigían que la universidad desinvierta en empresas vinculadas a Israel y que la biblioteca cambie su nombre a 'Universidad Popular de Basilea Al-Araj'. La universidad ha anunciado que las personas que infrinjan las normas y políticas de la universidad enfrentarán consecuencias disciplinarias.