
María Jesús Montero, vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, se declara profundamente traicionada por Santos Cerdán, quien dimitió como secretario de Organización del PSOE después de que se difundieran audios sobre su implicación en el cobro de comisiones en adjudicaciones de obras públicas. Montero defiende la continuidad del Gobierno de coalición de PSOE y Sumar, destacando logros como 22 millones de personas trabajando, una economía española que crece casi el doble que la zona euro, y un Salario Mínimo Interprofesional (SMI) aumentado. También critica la falta de explicaciones del presidente de la Junta de Andalucía, Moreno Bonilla, sobre casos de corrupción en su partido.