
Haití, Sudáfrica y Sudán del Sur son los países más afectados por el recorte de la ayuda de EEUU, según un informe de Amnistía Internacional. El recorte ha afectado a millones de personas en 177 países, especialmente en sectores como la salud, los derechos humanos y la educación. En Haití, el 97% de los tratamientos contra el VIH dependen de la ayuda extranjera, y el recorte ha llevado al cierre de 128 centros de tratamiento de VIH. En Sudáfrica, el recorte podría provocar más de 600.000 muertes relacionadas con el VIH en una década. En Sudán del Sur, el recorte ha obligado a cerrar clínicas esenciales y refugios para mujeres víctimas de violencia.