
En 2022, Japón inició proyectos para buscar tierras raras en el fondo del océano para reducir su dependencia de China. En 2024, se descubrió un yacimiento de 230 millones de toneladas de tierras raras cerca de la isla de Minamitori. Recientemente, una flota china con dos portaaviones, el Liaoning y el Shandong, ingresó en la zona económica exclusiva de Japón, a 300 kilómetros al suroeste de Minamitori, lo que marca una nueva fase en la proyección naval de China y genera preocupación en Tokio y Washington. La isla de Minamitori es estratégica debido a sus depósitos submarinos de metales raros, fundamentales para tecnologías estratégicas y baterías de alta capacidad.