
La Unión Europea ha impuesto un arancel adicional del 20,7% a los vehículos eléctricos fabricados en China, lo que afecta a la rentabilidad del Cupra Tavascan de Seat. La empresa amenaza con 1.500 despidos en Martorell si no se reducen los aranceles antes de marzo de 2025. Seat también debe cumplir con los objetivos de emisiones contaminantes establecidos por Bruselas y está negociando con las autoridades europeas para flexibilizar la normativa. La fábrica catalana de Seat es una pieza clave para la empresa, que produce más de 443.400 unidades en esa factoría. Las dificultades económicas ya han llevado a Seat a aplicar distintas rondas de despidos desde 2022.