
Un apagón masivo ocurrió el 28 de abril de 2025 en España y Portugal, afectando a millones de personas. La empresa Red Eléctrica señaló que tardaría entre seis y diez horas en restablecer completamente el suministro. El origen del fallo apunta a un problema en la red eléctrica española, posiblemente provocado por un fenómeno atmosférico raro. La interrupción eléctrica afectó a trenes, aviones, transportes públicos y servicios esenciales. La Dirección General de Tráfico recomendó evitar desplazamientos innecesarios. Los servicios sanitarios respondieron con rapidez, activando generadores de emergencia en hospitales. El transporte ferroviario y aéreo se vio especialmente afectado. El Gobierno español y la Comisión Europea ofrecieron apoyo inmediato.