
Un dueño de un perro llamado Toby utilizó un AirTag para localizarlo, pero descubrió que no es un GPS y no puede enviar su posición en tiempo real. El AirTag necesita que haya otros dispositivos de Apple cerca para enviar su posición. Después de una búsqueda, Toby fue encontrado en la casa de los padres del dueño, y se descubrió que el AirTag había actualizado su posición cuando Toby llegó a la casa, donde había otros dispositivos de Apple. El dueño aprendió que el AirTag no es infalible y que es mejor utilizar un localizador GPS para mascotas.