Meta ha anunciado un proyecto llamado Waterworth, que consiste en un cable submarino de más de 50.000 kilómetros que unirá los cinco continentes principales. Este cable será el más largo de 24 pares y estará compuesto por 8 o 16 pares de fibra. La inversión es multimillonaria y se realizará en varias fases a lo largo de los años. El objetivo es fortalecer la posición de Meta en el segmento de las autopistas digitales y impulsar su inteligencia artificial. El cable submarino será protegido mediante técnicas de entierro mejoradas y se buscará protegerlo de otros peligros, como anclas arrastradas que pueden provocar cortes en los cables.