
El Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) ha creado un algoritmo de control capaz de hacer que los drones puedan esquivar tormentas. El sistema utiliza un enfoque llamado meta-aprendizaje, que permite al dron recoger muestras de su entorno y entrenar un modelo que decide la mejor estrategia para seguir su camino. En simulaciones y pruebas reales, el sistema del MIT redujo a la mitad el error de trayectoria respecto a métodos tradicionales, lo que resulta crucial cuando se transportan cargas delicadas o valiosas. El algoritmo puede ser utilizado en aplicaciones como la entrega de medicamentos, la inspección de infraestructuras, la agricultura de precisión y el monitoreo ambiental. Los investigadores buscan mejorar el sistema para que el dron pueda lidiar con multifuentes de perturbación y aprender de forma continua.